|
Lo que se siente es tan fuerte
como el Outlander. La agresividad de los paragolpes GLS acentúa la
simetría de los gruesos rieles del techo y de los alerones laterales,
invitándolo a aventurarse en la naturaleza. En la ciudad, las otras
características únicas del Outlander salen a relucir empezando por la
sofisticada línea de su esbelta carrocería y la fuerte impresión que causa
su parrilla y sus faros de 4 vértices con las luces altas
multirreflectoras y luces bajas tipo proyector. |